Queso Belga

Bélgica es un país que sobresale por la cultura quesera tan rica que atesora, puesto que tiene más de 80 variedades de quesos diferentes.

La elaboración artesanal del queso belga va a juego con este tipo de procesos en muchos otros productos que también son propios de este pequeño país del oeste de Europa.

Quesos Belgas

Aunque los quesos más conocidos son los de francia, los quesos Belgas también tienen una larga trayectoria en el ámbito culinario.

Existen muchos tipos de quesos belgas, pero los más conocidos son:

Queso Chimay

El queso Chimay procede de la misma abadía en la que se fabrican las cervezas del mismo nombre, que aluden a un municipio llamado así.

Este queso de pasta blanda está aderezado con cerveza roja Chimay Rouge. Madurado durante dos semanas, el lúpulo de cerveza le confiere un toque amargo.

Lo cierto es que, en muchos de los productos de queso belga más reconocidos entre sus consumidores, la cerveza tiene una fuerte presencia en los productos más extendidos.

Otro de los quesos más apreciados entre los quesos belgas es el Brugge Abadia, un queso de leche de vaca con un contenido en grasa del 55%. Su sabor es suave, que evoca a la cerveza Rodenbach que se emplea en el proceso de elaboración.

El color amarillo de su superficie es otro de sus aspectos más peculiares. Se puede maridar con vino blanco seco o Jerez.

Este queso es muy adecuado para una tabla o como aperitivo.

El queso de Bélgica cuenta con una tradición muy asentada, dado que su origen se sitúa en muchos siglos atrás, a cargo de los monjes, quienes se encargaban de su elaboración artesanal en estas instalaciones.

El queso trapense es una firma que recoge aquellos productos elaborados por monjes y monjas de las abadías de la Orden de la Trapa. Para que un queso sea considerado trapense, este se debe elaborar en un monasterio o cerca de él, a cargo de quienes lo habitan y la gestión de esta labor y sus beneficios deben invertirse en el sustento del monasterio y en obras de caridad.

La abadía de Chimay es una de las más célebres de Bélgica, aunque también están las de Orval y Westmalle.

Las características comunes de los quesos trapenses es que son, en su mayoría, semiprensados, con leche de vaca cruda o pasteurizada. Sus cortezas van desde el blanco al dorado u ocre y el sabor que se consigue puede ir desde el suave hasta fuerte dependiendo de su especiado.

Queso Brugge

El queso Brugge es una de las variedades más célebres dentro del queso belga. Su composición, basada en leche de vaca. 

Con el queso Brugge conseguirás una experiencia gastronómica única y especial, gracias a una suave textura, un sabor inconfundible y un contenido graso medio, lo que le hace ser uno de los más demandados por los amantes del queso internacional.

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